Dale 10 minutos de adelanto a tu despertador sobre tu horario habitual y date permiso para quedarte en la cama durante 5 minutos preguntándole a tu mente: ¿qué estaba soñando?
Tu mente contestará esta pregunta como cuando te despiertas y de una manera inconsciente le preguntas ¿qué día es hoy? ¿tengo que ir a trabajar o hoy me toca el día libre? ¿qué tenía que hacer hoy? ¿Es esta mi cama o me he quedado a dormir en casa de alguien?
Sin darte cuenta le haces todas estas preguntas para poder reubicarte en tu presente. De igual manera contestará tus preguntas sobre lo que has soñado.
¿Cuando no contesta?
Puede haber algunas razones por las que al principio no quiera contestar.
Si cuando eras pequeño y tuviste alguna pesadilla y te despertaste asustado, tus padres o cualquier persona mayor en la que tu confiabas te dijo: "no tiene importancia solo es un sueños, no piense más en ello".
Estás programado o domesticado para no recordar tus sueños, así que ahora puedes decirle que sí que te interesan los sueños . En la medida que insistas que seguir preguntando ¿qué estaba soñando? empezarás a recibir la respuesta.
Puede que también en algún momento de tu pasado tuviste algún sueño premonitorio sobre el fallecimiento de tu abuelo o algún ser querido y te asustaras y decidieras que no querías saber nada sobre los sueños.
Tienes que saber que ese sueño lo tuviste para que te prepararas y cuando llegara el momento el impacto de la noticia no te causara un shock. Tus sueños solo pretenden ayudarte incluso para estos momentos tan dolorosos con los que nos encontramos en la vida.
Ahora puedes volver a programarte, ya creciste, ahora ya sabes.
Puede que te asuste tu mundo interior. Puede que el contacto con tu parte más inconsciente te asuste por desconocida. A todos nos da miedo aquello que no es cotidiano, con lo que no tenemos mucho contacto. Pero has de saber que como un niño sensible esa parte de ti sólo quiere ser amada, atendida y a cambio te llenará de un gran amor.
Acércate a tu mundo interior con la seguridad que encontrarás una fuente inmensa de amor, comprensión, tolerancia y ayuda.
¿Como atraparlos?
Dedica los otros 5 minutos de los diez que cogiste al principio y escribe lo que hayas recordado, por poco que sea en el cuaderno que dejaste en la mesa de noche preparado con el bolígrafo (También puedes grabarlo). Aunque recuerdes solo una frase, escribela.Esto hará que cada vez recuerdes más. Estas ejercitando el músculo de los recuerdos de los sueños.
Vive tus sueños
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